
Y, de repente, un país, gritó al unisono eso de "Yo soy español, español, español". Es para gritarlo y para hacerle ver al mundo que los españoles estamos orgullosos de serlo, orgullosos de estos jugadores que nos han hecho vibrar con su juego espectacular. Es cierto, señores, España es campeona del mundo.
Doy las gracias a mi selección que ha logrado que millones de españoles colguemos sin vergüenza la bandera de España en nuestros balcones.